martes, 27 de julio de 2010

Cro-Magnon


En mi familia nos gusta el bricolaje. Es una actividad a la que nos entregamos en cuerpo y alma. Nuestro trastero parece un almacén de Bosh® y mi padre es cliente Honoris Causa de todas las ferreterías del país. En mi dulce hogar no pasa más de un mes sin que desaparezca un tabique, una habitación cambie de color, se monten y desmonten un par de armarios y se cambie la decoración del salón. Yo a veces he regresado a casa de mis padres y he tenido que comprobar en GoogleMaps® que estaba en la casa correcta.

Las familias normales van a la playa los domingos a tragar arena, nosotros nos vamos de excursión al Leroy (Merlin)®.

Así que en eso andábamos ayer, cuando me tropecé con un hombre de cromañón que despertó a partes iguales mi estupor y mi furia asesina. El espécimen en cuestión era un rubito con cara de no haber soltado aún la cadena de la pubertad.

Bicho: Perdona, ¿y para este tablero tenéis las cantoneras disponibles o también hay que pedirlas?
Sr. Cromañón: Hay que pedirlas...
Bicho: Aaamm...
Sr. Cromañón: Pero son muy fáciles de poner. Son cantoneras especiales para mujeres: se ponen con la plancha ¿Te gusta planchar?
Bicho: ¿¿¿¿¿¿¡¡¡PERDONA!!!????? (¿¿¿Eso pretendía ser un chiste??? ¿¿Te funciona la técnica del macho ibérico cuando vas los sábados a Pachá, so imberbe desangelao??

Así que le fulmino con mi mirada de bicho desquiciado, dejo el tablero en la mesa de corte y me alejo mientras mi cabeza da vueltas y babeo e insulto furiosa como si fuera la niña de El Exorcista.

Y yo me pregunto, ¿¿en qué mierdas se gasta el Ministerio de Igualdad la pasta?? Porque está claro que sus mensajitos progres no están calando para nada en la sociedad...

lunes, 26 de julio de 2010

Piscinas en verano



Si quieres me quedare callada hasta que vuelvas
No trato de convencerte de que es mejor así
tan solo quiero saber que no voy a volver a hacerte daño

miércoles, 21 de julio de 2010

Confesión (XV)


Creo que poseo un extraño trastorno que he bautizado como phonephobia

Sin ánimo de ofender y a riesgo de no ser comprendida, tengo que confesar (una vez más) que no soporto hablar por teléfono. ODIO mantener conversaciones por teléfono y ODIO estirar los temas como si fueran chicles, sólo para seguir parloteando, parloteando y parloteando sin más.

Que no quiero ser grosera, ni es nada personal, pero a mi los teléfonos me arden en las manos como si fueran agua bendita.

Ya sé que nadie lo entiende, pero es así.

*/ Contra los sms sin embargo, no tengo nada.

I will survive



Did you think I'd crumble?
Did you think I'd lay down and die?
Oh, no, not I.
I will survive.


*/ Y de entre tooodas las versiones del mundo mundial, hoy me quedo con la de Cake. El verano es insoportable, pero siempre hay que saber buscarle la sonrisa.

Voy a sobrevivir al calor, al frío y a lo que se me ponga por delante. Olé!

martes, 20 de julio de 2010

Veleta

Ante tu natural ir y venir de veleta, sólo puedo anteponer mi recién adquirida vocación de brújula.

Usb


Todo sería más fácil así. En cuanto la ciencia avance un poquito, me haré instalar un puerto USB en el cogote y a correr. Ya no tendré que preguntarle nada a nadie, ni matarme a estudiar. En unos segundo tendré en la cabeza toda la información que necesito.

*/ Y lo mejor de todo es que traen incorporada la opción de "Expulsar con seguridad".

lunes, 19 de julio de 2010

Rossi (the return)


Pues sí, Rossi ha vuelto, muleta en mano y se ha sacado un cuarto puesto de la manga en el circuito de Sachsenring. Olé. Y yo he vuelto a quedarme embobada con la carrera de Moto Gp, (¿por qué será?).

Durante estas semanas he estado haciendo un exhaustivo sondeo y he descubierto que casi todo el mundo odia a Lorenzo (con casi me refiero a todo el mundo excepto Ernest Riveras y Dennis Noyes*, que son inexplicable e incondicionalmente lorencistas). Así que ayer además de la vuelta de Rossi, celebramos la victoria de Pedrosa. Grande.


Y ya estoy esperando el GP de Laguna Seca, yyyuhhuuuuu!

*/ No soporto a estos dos comentaristas...

Sin noticias

(de Gurb)

15.00 - Ahora que dispongo de dinero, decido recorrer la zona céntrica de la ciudad y visitar sus afamados comercios. Ha vuelto a nublarse, pero por el momento parece que el tiempo aguanta.

16.00 - Entro en una boutique. Me compro una corbata. Me la pruebo. Considero que me favorece y me compro noventa y cuatro corbatas iguales.

16.30 - Entro en una tienda de artículos deportivos. Me compro una linterna, una cantimplora, un camping butangas, una camiseta del Barça, una raqueta de tenis, un equipo completo de wind-surf (de color rosa fosforescente) y treinta pares de zapatillas de jogging.

17.00 - Entro en una charcutería y me compro setecientos jamones de pata negra.

17.10 - Entro en una frutería y me compro medio kilo de zanahorias.

17.20 - Entro en una tienda de automóviles y me compro un Maseratti.

17.45 - Entro en una tienda de electrodomésticos y lo compro todo.

18.00 - Entro en una juguetería y me compro un disfraz de indio, ciento doce braguitas de Barbie y un trompo.

18.30 - Entro en una bodega y me compro cinco botellas de Baron Mouchoir Moqué del 52 y una garrafa de ocho litros de vino de mesa El Pentateuco.

19.00 - Entro en una joyería, me compro un Rolex de oro automático, sumergible, antimagnético y antichoque y lo rompo in situ.

19.30 - Entro en una perfumería y me compro quince frascos de Eau de Ferum, que acaba de salir.

20.00 - Decido que el dinero no da la felicidad, desintegro todo lo que he comprado y continúo caminando con las manos en los bolsillos y el ánimo ligero.

(Sin noticias de Gurb, Eduardo Mendoza)


Humor absurdo en estado puro.

viernes, 16 de julio de 2010

Salir corriendo



*/ A mi Amaral ni fú, ni fá; principalmente porque me parecen de lo más depresivo. Pero hoy me apetece esta canción.

El dios de las pequeñas cosas (II)

- Ammu -dijo Chacko en tono tranquilo y deliberadamente despreocupado-, ¿no podrías hacer un pequeño esfuerzo para no verlo todo con tu cinismo de fracasada?

El silencio llenó el coche como si empapara una esponja. Fracasada cortó el aire como un cuchillo. El sol brilló con un suspiro estremecido. Ése era el problema con los parientes. Al igual que los médicos aviesos, sabían dónde hacer más daño al tocar.

(Arundhati Roy)

jueves, 15 de julio de 2010

Confesión (XIV)


Debe ser que en vez de memoria fotográfica, poseo memoria fotogénica; porque en mis recuerdos siempre sales mejor de lo que en realidad eres.

La cigarra y la hormiga


Mucho ha cambiado el cuento, os lo digo yo.

Las cigarras han depurado su estrategia de vagancia estival. Ya no se conforman con pasarse todo el verano a la bartola, dale que dale al cante jondo. No. Es que ahora además no quieren aguafiestas alrededor. Así que se han organizado y se han zampado a todas las hormigas del jardín. Han reclamado las zonas verdes como coto privado de caza y se han hecho las reinas de la ciudad.

En mi patio, sin ir más lejos, se han montado un tablao flamenco que ya quisiera el Corral de la Pacheca. Y ahí están todo el día, con sus quejíos y sus cri cri cri y ni la ola de calor ha podido con ellas.

Yo lo aviso, llegará un día en que las chicharras dominen el mundo.

Supervivencia

No te lo vas a creer, pero pesar de no estar a tu lado, he sobrevivido.

martes, 13 de julio de 2010

A golpes

A golpes.
Quisiera meterte a golpes
mi corazón en su sitio.

De papel


He encontrado una solución a mi medida.

Hace tiempo que me perdí y voy dando tumbos sintiéndome náufrago. Así que voy a construir mi propio barquito de papel. Le sacaré brillo al catalejo y remaré.

Cuando vuelva a pisar tierra firme, hablaré de la travesía, como si siempre hubiera sabido adónde me dirigía.

Marea roja


INCREÍBLE



P.D.- Y yo ya estoy pensando en el Mundial de Turquía...

domingo, 11 de julio de 2010

España wins

SI!!!!

Nos vamos a La Cibeles!

Españoleando


Podría ponerme en plan ácido, como hago habitualmente; y maldecir al opio del pueblo, a las vuvuzelas y al resto de la parafernalia. Podría bajar a abofetear a todos los gañanes que, desde las cuatro de la tarde, pasan por mi calle tocando el pito (y los coj***s).

Pero la verdad es que me mola. El ambiente, las banderas, la unidad y esa embriaguez optimista que de repente ha inundado toda la ciudad (o ¿¿el país??). Y quizás sea sólo fútbol, sí, pero parece al menos que ha logrado despertar a una España adormecida por el infatigable azote de la crisis.

Así que me voy a tragar el partido, con la cara pintada y los dedos cruzados. Y si ganamos o perdemos, ya da igual; sólo espero que podamos mantener la ilusión el tiempo suficiente, para sacudir definitivamente todas las derrotas.



P.D.- Eso sí, si ganamos yo hoy me baño en La Cibeles ^^

Dietas

Creo que podría sobrevivir todo el verano tomando sólo salmorejo, limonada y melón.

Aaaarrrrggg, qué fresquito, se me hace la boca agua de pensarlo... ñam, ñam, ñam!

Cómo ser buenos

Soy una buena persona. En casi todos los aspectos. Pero estoy empezando a pensar que el ser una buena persona en casi todos los aspectos no sirve de gran cosa si eres una mala persona en uno solo. Por que la mayoría de la gente son buena gente, ¿o no? La mayoría de la gente quiere ayudar a los demás, y si su trabajo no le permite ayudar a los demás entonces lo hace de cualquier otra forma posible: ocupándose de los teléfonos de los Samaritanos una vez al mes, o participando en marchas para recaudar dinero de beneficencia, o rellenando cheques para asociaciones de caridad. No es bueno que les diga a ustedes que soy médico, porque sólo lo soy durante los días laborables. He estado acostándome con alguien que no es mi marido fuera de las horas de trabajo -no soy tan mala como para hacerlo en las horas de trabajo-, y, de momento, ser médico no puede compensar eso, por muchos furúnculos rectales que me digne examinar.

(Cómo ser buenos, Nick Hornby)


Oh, Dios Mío! Katie es tan cínica... la adoro!!!

viernes, 9 de julio de 2010

Confesión (XIII)

El calor ha derretido mi cerebro y el bichoblog se ha convertido en un lugar inhóspito en el que no crece ni una sola idea.

sábado, 3 de julio de 2010

viernes, 2 de julio de 2010

El listillo

(o Cómo reconocer a quien merece ser repudiado.)

El listillo es un personaje detestable. Estoy convencida de que todos hemos tropezado con un fantasma de este calibre al menos una vez en la vida y ha sido difícil controlar nuestro irrefrenable impulso de estrangularlo.

Al listillo se le ve venir. Posee una serie de rasgos únicos e intransferibles, inherentes a su personaje que le permite ser reconocido en cualquier ámbito. Por ejemplo, le podemos reconocer por su afán de sentarse siempre en primera fila y por su continua diarrea verbal.

El listillo suele ser puntual, más que puntual, suele ser fatigosamente anticipado. Él es el primero en llegar a cualquier compromiso. En mi caso, mi listillo, está esperando en la puerta del aula un rato antes de que llegue el portero.

Si por fatales designios ajenos a su minuciosa programación, el listillo llega tarde a una clase, irrumpe en ella de manera demencial, armando tanto alboroto como un delfín robando en una pescadería. En cualquier caso, el listillo consigue su lugar en la primera fila, aunque para ello tenga que interrumpir la conferencia y forzar a treinta personas a levantarse.

El listillo tiene al menos dos certezas axiomáticas en la vida:
1) Él siempre es más inteligente que los demás; y por tanto los demás somos imbéciles de remate.

2) Si él no tiene la razón, es porque todo el mundo se equivoca.
Por ello, el listillo cree tener potestad para, por lo bajini, pasarse el día "corrigiendo"a los ponentes; a veces (pocas) acertadamente, otras veces (la mayoría) como un ignorante obseso.

El listillo SIEMPRE tiene un broche final, una puntualización de última hora, un gran comentario para verter sobre nuestras cabezas. Es el típico fatiga que, cuando llega la ronda de preguntas, levanta el brazo ansioso e insistentemente y cuando (irremediablemente) le conceden la palabra, es incapaz de contenerse y lanza sus preguntas/comentarios en ráfagas de tres. El alma cándida, que en un ciclo de conferencias prolonga el agónico final treinta y cinco minutos más de lo previsto.

El listillo es ese imbécil especializado en amargar la vida a personas normales y corrientes como yo. El listillo es ese cretino, que un día volverá a casa sin dientes; porque su suprema inteligencia no fue capaz de pronosticar que mi furia asesina (y la de muchos otros) era directamente proporcional a su pesadez.